No es una opción que no haya un cuadro en casa – Michelle Melhem

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Michelle es psicóloga de profesión y tiene un postgrado en política internacional en NYU. Su vocación es el trabajo social, estar al servicio de los demás y promover acciones que ayuden al bienestar general. Trabaja por elección para el Estado en la provincia de Buenos Aires. Todos los días viaja de Palermo a La Plata para para hacer su trabajo y estar cerca de quienes más necesitan. Tiene una versatilidad y generosidad admirable!

Michelle, amiga de Diderot.Art, una mañana nos abre las puertas de su casa. Vive con su novio en un departamento en Palermo frente a una plaza muy luminosa y alegre como lo es ella. Michelle, tiene una obra de Fernando Brizuela, artista de Diderot.Art, y nos interesa que nos cuente cómo es su relación con el arte. Cómo se encontró con esa obra de Fernando.

Al entrar a su casa nos dimos cuenta que es el fiel reflejo de su esencia. Es una mezcla de estilos que sintonizan a la perfección. “Todo lo que nos gusta entra a casa”, nos cuenta. Esa es la única premisa. Así es como fue recolectando objetos de viajes, como un baúl traído de un viaje a la India, muebles u objetos de gente querida como su abuela. “No tenía nada que ver pero tenía que estar. Me hace bien, un pedacito de la gente que quiero” nos afirma. Así fue como por ejemplo mandó a enmarcar unos pañuelos de su abuela Marta que hoy cuelgan en uno de los pasillos. Excelente idea!.


 
 

¿Qué te gusta del arte?

Quise estudiar Curaduría de Arte y me incliné por la psicología y el trabajo social. Pero me gusta mucho la historia del arte. Siempre que viajo me relaciono con el arte, me compro muchísimos libros de arte, me encanta.


 
 

Michelle es además hija de una fotógrafa profesional y coleccionista de arte. Nos cuenta que vivió rodeada de arte. En todas partes había arte, mucho arte, demasiado arte hasta tal punto que lo cuestionaba. “¿Por qué tiene que haber arte hasta en la cocina?” Le preguntaba a su madre. Y hoy cuelga de su propia cocina abierta una gran obra de “Liliana Golubinski” que no puede lucir mejor! Así de íronica es la vida!


 
 

¿Qué espacio ocupa el arte en tu casa?

No es una opción que no haya un cuadro en mi casa. Lo lindo tiene que estar en todos lados. No es importante si es bueno o es malo. Me gusta un cuadro, conecto con él y lo quiero en casa.


 
 

¿Cómo conectás con el arte?

No somos de ir al museo, ni a vernissage. No disfruto el arte desde lo social, pero el arte esta siempre en casa. Siempre estuvo presente en mi vida y sigue estando. Lo disfruto mucho desde lo cotidiano.

La casa de Michelle tiene cuadros y obras por todos lados. En su elección del arte confluye el mismo espiritu que en el resto de los elementos de su casa. Mezcla con total armonía arte de diversos estilos, y diversos artistas consagrados y emergentes como Liliana Golubinski, Fernando Brizuela, Keneth Kemble, Ignacio Valdez y Mariana Alexander. Collage, pintura, escultura, fotografía.

¿porqué elegiste la obra de Fernando Brizuela?

Mi novio me había regalado para mi cumpleaños una obra de Nacho Valdez. Me encantó que me regalará arte. Me pareció muy original. Me emocionaba que haya tenido la idea, que lo haya buscado. Para los que no somos del ambiente del arte, pensamos que es difícil entrar, que es un ambiente cerrado, por eso cuando mi novio conoció al artista le gustó esa experiencia porque le pareció muy abierto, le gustó lo que le contó de su obra, conectó con el artista y con su obra. A mí es la obra que más me gusta de casa, por la obra en sí y por todo ese proceso de que lo haya buscado y pensado para mí.

Fue tan linda la sensación de recibir una pieza de arte, que yo también para su cumpleaños quise regalarle una obra. Algo que quede para siempre. Y elegí la escultura de Fernando Brizuela. Me gustó que era una obra de arte, pero a la vez parecía un juguete, me divertía, me parecía fácil de tener en casa. Tuve la oportunidad de ir al taller y conocer al artista. Me encantó esa experiencia. Me gustó mucho él, la obra del artista y su actitud. Me involucré con lo que el artista me contó de sus propias experiencias, lo que le interesaba y me sentí identificada, conecté con esa historia.

“Me encantó la experiencia de conocer al artista”