Daniel Stroomer es quien está detrás de NASE POP, la firma que aparece en los murales hechos en medianeras, camiones, persianas de negocios y paredones de distintos barrios de Buenos Aires
«Para mi el arte es libertad…me siento libre cuando estoy pintando»
Dan nació en Holanda donde empezó a pintar desde muy joven y donde también se formó como diseñador gráfico. Hace ocho años que Dan se mudó por amor de Amsterdam a Buenos Aires. La adaptación fue difícil pero con el tiempo fue entendiendo que esta ciudad, que no era como ninguna que él hubiera conocido anteriormente, de alguna forma lo estaba ayudando, el contraste le venía bien. “Me gusta la locura que hay, la calle, … Hay más libertad”, sentencia finalmente Dan. A pesar de tener su taller, el soporte de la obra de Dan es la ciudad, es un artista de la calle de pura cepa. El holandés encuentra en Buenos Aires una dosis de caos que le atrae y le sirve para contrarrestar la estructura holandesa que lleva en la sangre. Lo de adentro se traslada a lo de afuera y así, su proceso de trabajo empieza en una hoja cuadriculada donde en lápiz dibuja el modelo de su mural que luego pasa a la computadora donde termina de darle color a la obra. Al lugar donde ejecuta la obra lleva sólo una tablet o incluso el celular y desde ahí calca lo dibujado previamente a mano y en la computadora casi sin modificaciones. Su proceso es siempre así, muy estructurado y sin alteraciones.
«Me inspira la cuidad, la música….Me gusta la locura que hay en Buenos Aires, la calle, el caos…»
Su obra, sin embargo, tiene una carga de locura importante: grúas, andamios a varios metros del suelo y en larguísimas jornadas ayudan a Dan a concretar sus proyectos, ya sea personales o por encargo de marcas, municipios o universidades. Por períodos Dan hace obra en formatos más tradicionales en su taller de Palermo que son como fragmentos de sus grandes obras. Lo que es claro es que así como es adentro es afuera y así como es arriba es abajo, el principio de correspondencia se aplica a un joven artista que en algún momento sólo quería dejar su marca en las paredes de su ciudad y que hoy suma también la necesidad de conectarse con el arte desde el lugar más conceptual. Así es que cada artista define al arte según lo que significa en su interior y que Dan sin dudar ni un segundo afirma: “El arte es libertad”.