María Victoria Lamas es Diseñadora Gráfica, recibida de la Universidad de Buenos Aires. Pero la vida la llevó hacia las orillas del arte. Junto con Joaquín Burgariotti fundaron Lamas Burgariotti, un estudio de diseño que intersecta diseño y arte. “El arte y el diseño para nosotros son algo habitual. Tratamos de trabajarlo de forma horizontal. Tanto una obra como un proyecto de diseño, como un libro o una página web. Buscamos que entre al estudio de forma horizontal. Es decir, la tomamos de la misma forma: como un proyecto a desarrollar”, explica Vicky.
Lo que más disfruto de ser una artista multidisciplinaria es explorar diferentes técnicas y modos de hacer, sin la necesidad de ser una profesional del diseño. En el arte me doy el lujo de descubrir, nadie me juzga. Lo hacés y ya
Esta dupla de artistas experimenta con todo tipo de materiales. “Diferentes disciplinas hicieron que nos construyéramos, de a poco, en lo que somos: diseñadores asociados con el mundo del arte. A su vez, eso hizo que empezáramos a trabajar en nuestros propios proyectos de obra. Así que se van cruzando e interrelacionado. Por ahí, no estamos haciendo una pieza nuestra, pero estamos trabajando para un libro de un artista, entonces estamos todo el tiempo vinculados al arte. Se fue dando de forma natural”, continúa.
Ambos buscan indagar en el vínculo entre tecnología y las emociones. En sus obras hablan sobre la transferencia de información que existe del pasaje de un estado digital a analógico y viceversa. “Buscamos un concepto: lo digital como el quinto estado de la materia. Tratamos de horizontalizar y no tomarlo como menos valioso si la pieza era digital. Todas las áreas fueron conviviendo y no nos importaba mucho cómo iba a quedar la pieza final. Fueron procesos: un dibujo, después eso lo escaneamos y lo pasamos a la compu, luego lo imprimimos en una tela, le tiramos aerosol. Muchos procesos para no decir que la obra es una sola cosa. Tratamos de que fuera muy híbrido y que no se sepa bien cómo está hecho. Esa es un poco la premisa del cruce entre una cosa y la otra”, aclara.
Para los procesos creativo de la dupla siempre manejan un concepto de fondo. Pero cuando trabajan de forma individual un cuerpo de obra propio, Vicky reconoce que se deja fluir. “Tengo ganas de hacer un dibujo en carbonilla y lo hago. No hay un concepto de por qué hacerlo, sino simplemente explorar la técnica. Algunas son simplemente exploración de collage digital, luego transformados en tela, desde mi obra”, señala. Entre sus influencias Vicky cita a Yvone Rainer, Kate Bush, Willem de Kooning, Bruno Munari, entre otros. “Lo que más disfruto de ser una artista multidisciplinaria es explorar diferentes técnicas y modos de hacer, sin la necesidad de ser una profesional del diseño. En el arte me doy el lujo de descubrir, nadie me juzga. Lo hacés y ya”, confiesa y agrega: “Para mí el arte es un lugar a veces desconocido donde me gusta sorprenderme. Me gusta hacerme preguntas, transitar no el lugar seguro y común. Descubrir, a través del arte. conceptos, ideas, investigar. Es un poco todo eso a la vez y también es una forma de vivir”.